Capirotada
La capirotada, es un postre rústico tradicional en temporada de Cuaresma, que además de los elementos dulces mexicanos que uno esperaría encontrar en un plato así (el piloncillo, la fruta seca, pan, mantequilla) lleva cebolla y jitomate. El resultado es un budín de pan muy apto para comer en el desayuno, la merienda o de postre y que transporta al comensal a los tiempos de antaño cuando los placeres eran más sencillos - y tal vez más profundos.
Tiempo de preparación: 30 minutos
Tiempo de cocina: 30 minutos
Total: 1 hora
Cantidad: 6 - 8 porciones
Ingredientes:
- 1/2 barra de mantequilla
- 1 jitomate mediano
- la mitad de una cebolla pequeña
- 1/4 de kilo (9 onzas) de piloncillo
- 1 y 1/2 taza de agua
- 1 palito de canela
- 3 clavos de especie
- 1/2 taza (2 onzas ) de almendra
- 4 piezas de pan (bolillo o semejante)
- 3 tortillas de maíz o de harina
- 1/2 taza (3 onzas) de uva pasa
- 1/4 de taza de grageas de colores (opcional)
- 1/2 taza (3.5 onzas) de queso cotija rallado
- 1/2 taza (aprox. 2 onzas) de queso manchego rallado
Preparación:
- Saca la mantequilla del refrigerador para que se vaya calentando a tiempo ambiente para después poderla untar.
- Pica toscamente el jitomate y la cebolla.
- Coloca en una cacerola mediana el piloncillo, el agua, la canela, los clavos, el tomate y la cebolla. Cuécelo a fuego bajo hasta que el piloncillo se haya desmoronado completamente. Sigue cociendo el jarabe, moviendo frecuentemente la mezcla, durante unos 15 minutos para que se espese un poco (no queremos un jarabe muy espeso) y se suelten los sabores de las especies.
- Ya cocido el jarabe, cuélalo y descarta todos los elementos sólidos. Pasa el líquido a una pequeña jarra o un frasco de vidrio para después poderlo verter de manera controlada sobre el pan.
- Pica la almendra y tuéstala sobre un comal o en una sartén antiadherente sobre fuego medio, moviéndola muy frecuentemente, durante unos 5 minutos o hasta que quede doradita. (Hay que poner mucha atención para que no se quemen las almendras.)
- Corta los panes en rebanadas de entre centímetro y medio y dos centímetros de grosor. Unta de mantequilla las dos superficies de cada rebanada y tuéstalas sobre un comal (o en una sartén) sobre fuego medio hasta que estén doradas por ambos lados.
- Unta de mantequilla las tortillas. Colócalas en el fondo de una olla de aproximadamente 12 pulgadas / 30 centímetros de ancho. Córtalas como sea necesario para que cubran el fondo de la olla; esto va a ser la capa inferior de la capirotada, formando una barrera entre la olla y el pan para que éste no se queme.
- Sobre la tortilla coloca una capa de rebanadas de pan, acomodándolas de tal forma que cubran el fondo de la olla.
- Vierte lentamente la tercera parte del jarabe sobre el pan, trabajando sobre cada rebanada individual para que todas queden bien remojadas.
- Encima del pan esparce en capas la mitad de las almendras, la mitad de las pasas, la mitad de las grageas (si las vas a usar; sirven para agregar colores alegres a la capirotada) y la mitad de cada uno de los quesos.
- Coloca encima el resto del pan. Vuelve a mojarlo cuidadosamente con el jarabe de piloncillo; después repite las capas con el resto de los ingredientes. Por último, vierte encima todo el jarabe restante, asegurándote de que todo el fondo de la olla, desde el centro hasta las orillas, esté mojado y todo el pan bien empapado.
- Tapa la olla y cocina la capirotada sobre fuego medio bajo durante aproximadamente 30 minutos, hasta que el pan haya absorbido todo el líquido. Apaga el fuego y permite que la capirotada se enfríe a temperatura ambiente antes de comerlo.
- En el momento de servir tu capirotada, sácala de la olla a cucharadas grandes o córtala en cuadros y sírvelo con una espátula